La vida está lejos de ser un río tranquilo 🌊

Vivimos alegrías intensas que nos transportan. Hacemos encuentros extraordinarios que cambian literalmente el curso de nuestras vidas. Pero también sufrimos separaciones desgarradoras y violentas. Experimentamos el dolor, la injusticia y la tristeza…

Cuando la vida se vuelve oscura y el sol parece ya no querer brillar sobre nosotros; cuando el destino parece ensañarse sin razón aparente, nuestra fe puede ser fácilmente sacudida.

En esos momentos de profundo desconcierto, las promesas de Dios son nuestro mayor tesoro. Son el salvavidas al que nos aferramos esperando días mejores.

Dios siempre cumple sus promesas 

Cuando tenemos la impresión de que el mundo entero conspira contra nosotros, pueden ocurrir bajones de fe. No te preocupes: la fe no es lineal. Se mantiene, se trabaja y se cuida 🙇🏽‍♀️

Este mundo terrenal nos ha acostumbrado a obtener lo que deseamos con un clic, de manera instantánea. Entonces esperamos inconscientemente que todo, en nuestras vidas, suceda con la misma rapidez. Y cuando no es así, la frustración, la decepción y el sentimiento de injusticia se instalan, llevándonos a pensar que Dios no ha cumplido Su Palabra. 

Pero es el Diablo quien nos engaña, porque El Señor siempre cumple sus promesas. Su tiempo es simplemente a veces diferente al que esperamos ⏳ Tengamos en mente que en cada mal hay un bien y que todo sucede por una razón, aunque no podamos comprenderla. Con la cabeza metida en el trabajo, no tenemos una vista general y este mundo material nos ciega y nos presiona constantemente. 

Volviendo a las Santas Escrituras, podemos sanar las heridas de nuestras almas recordando las promesas de nuestro Señor. Porque sí, Dios obra por nosotros incluso cuando los resultados tardan en llegar ✝️

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5 promesas poderosas de Dios 

Aquí están 5 increíbles promesas de nuestro Señor para recordar cuando todo va mal. Dios tiene un plan para cada uno de nosotros, meditemos en Sus palabras y recordemos que Él siempre cumple Su Palabra y actúa constantemente para nuestro mayor bien. 

• “El Señor peleará por vosotros; y vosotros estaréis tranquilos.” Éxodo 14:14

Este versículo nos recuerda el episodio de Moisés frente al Mar Rojo, perseguido por el faraón y sus tropas. Cuando todo parecía perdido, el profeta se dirigió a su pueblo con estas palabras, antes de que el mar se dividiera en dos. A veces, lo mejor que podemos hacer es mantener la calma y esperar con convicción. Muy a menudo, buscamos desesperadamente retomar el control sin tener la menor idea de cómo actuar. Nos preocupamos, nos agitamos y la situación empeora. No olvidemos que el Eterno sabe mejor y nada le es imposible. Así que, desapeguémonos del miedo y confiemos en nuestro Señor en la adversidad. A menudo, es mejor dejar pasar la tormenta mientras Dios actúa por nosotros.

• “No te dejaré ni te desampararé.” Hebreos 13:5

La inquietud nos aleja de Dios y de Jesús. Debilita nuestra fe y nos vuelve tristes y amargados. El miedo al mañana, las preocupaciones materiales y económicas pesan cada día un poco más sobre nuestros hombros. Es tiempo de soltar y recordar esta simple verdad: Dios siempre proveerá nuestra subsistencia. Tranquilicémonos. Él nunca está sordo a nuestras oraciones y llamados de ayuda. Esta preciosa promesa se nos repite varias veces en el Génesis y también en el Deuteronomio, depende de nosotros mantenerla viva en nuestros corazones. Dios nunca nos abandonará !

• “Si Dios está por nosotros, ¿quién contra nosotros?” Romanos 8:31

Dios está de nuestro lado. ¿Cómo dudar cuando sabemos que Él entregó a su Hijo Cristo a la muerte por nuestra propia salvación? Este versículo nos recuerda lo importante que es relativizar la situación en la que nos encontramos. ¡Por muy tumultuosa que sea! Mantengamos firmemente en la memoria que todo lo que nos sucede es en realidad para nuestro mayor bien. El Señor está de nuestro lado permanentemente y tiene un plan para hacer prosperar a cada uno de sus Hijos. Gracias al Amor de Dios por medio de Jesús el Cristo, siempre saldremos victoriosos incluso de las posiciones más desesperadas.

• “Antes de formarte en el vientre de tu madre, te conocía” Jeremías 1:5

El Señor nos conoce. Él nos conocía incluso antes de desarrollarnos en el vientre de nuestras madres. Nos creó tal como somos, nos ve y nos ama. ¿No es esa la promesa más hermosa que existe? La de un Confidente que siempre escucha y nos acepta tal como somos. Ante Dios, no necesitamos llevar máscara. Podemos mostrar sin vergüenza lo que realmente somos. Ya no es necesario cumplir con las expectativas de la sociedad, preocuparnos por la opinión de los demás o temer no estar a la altura. El Señor nos conoce mejor que nosotros mismos y Su Amor es infinito. 

• “Porque yo sé los planes que tengo para vosotros, dice el Señor, planes de paz y no de mal, para daros un futuro y una esperanza” Jeremías 29:11

Es normal dudar, sentirse enojado y a veces tener la impresión de estar abandonado 😔 La desgracia actúa como un espejo deformante y amplificador de nuestras realidades. La tristeza, la decepción, la ira son sentimientos tan poderosos que eclipsan todo a su paso. El dolor, por su parte, nos susurra que nunca pasará. Es un engaño. Dios no nos prometió facilidad pero Él obra solo para nuestro mayor bien. Aunque Sus planes nos parezcan confusos y fuera de nuestra comprensión. Todo lo que sucede en nuestras vidas es solo bendición: si no es un beneficio evidente, es una lección para permitirnos superarnos y trascender. Dios ve más allá y sabe lo que es mejor para nosotros. Confiemos en Él y atravesemos las dificultades sin perder de vista que siempre hay una luz al final del túnel 🌟

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Creyentes, no nos culpemos por sentirnos abatidos y desanimados cuando los tiempos son difíciles. Después de todo, solo somos humanos. Dios nos creó así. Él sabe que las pruebas y los obstáculos a veces nos harán ser ingratos, perder la paciencia y cuestionarlo todo. Pero a pesar de eso, su Amor incomparable nos rodea y nos acompaña. Cuando el futuro parece oscuro, recordemos las Santas Escrituras y busquemos consuelo en Sus palabras. ¿Por qué no anotar en un cuaderno los versículos bíblicos que nos inspiran y nos devuelven el valor ¿para consultarlas cuando el ánimo está por los suelos? Apreciemos las Palabras de nuestro Señor y nunca olvidemos que Él siempre cumple sus promesas.

⬇️ Déjanos un pequeño comentario y dinos: ¿Cómo haces para manejar los períodos en los que todo va mal? ⬇️